E𝒙𝒊𝒔𝒕𝒆 𝒖𝒏𝒂 𝑳𝒆𝒚 𝒅𝒆 ó𝒓𝒈𝒂𝒏𝒐𝒔 𝒚 𝒕𝒆𝒋𝒊𝒅𝒐𝒔. Es 𝑳𝒂 𝑳𝒆𝒚 𝑱𝒖𝒔𝒕𝒊𝒏𝒂 𝟐𝟕𝟒𝟒𝟕 que dispone que toda persona mayor de 18 años es donante de órganos y tejidos, excepto que exprese lo contrario.
Pero, cuando el donante es pediátrico, tras fallecer, la legislación de nuestro país exige a sus padres o tutores legales el consentimiento y son ellos quienes deciden sin a tan inmenso dolor pueden transformarlo en amor, salvándole la vida a otros 8 niños.
Ante el fallecimiento de menores de 18 años no emancipados, sólo los padres o representantes legales pueden decidir sobre la donación y autorizar o no la ablación de órganos y tejidos.
El síndrome de corazón izquierdo hipoplásico que afecta a Benicio es un padecimiento que ocurre cuando partes del lado izquierdo del corazón (válvula mitral, válvula aórtica, ventrículo izquierdo y aorta) no se desarrollan por completo. La afección es congénita (está presente al nacer).
Lo que hoy conocemos como “Ley Justina” primero fue #LaCampañaDeJustina y tuvo su origen en Justina Lo Cane, quien con solo doce años y un trasplante de corazón que no llegaba le pidió a sus padres que siguieran, que había que ayudar a todos los que estuvieran o pudieran estar en su misma situación.