El récord que tiene Milei, el que puede alcanzar y el derrotero de la historia
Es el Presidente al que más rápido le decretaron una huelga y comparte con otros dos los que tuvieron más de una en los primeros 150 días de gestión. A este ritmo puede superar a Alfonsín. El palmarés que comparten Alberto Fernández, Cámpora y Perón, y cómo se comportó la CGT con cada Gobierno desde su creación.
Compartir
Sin juzgar el nivel de acatamiento, alto en algunas actividades y muy escaso o nulo en otras, se cumplió este jueves el segundo paro general que la Confederación General del Trabajo (CGT) y las dos ramas de la CTA (Autónoma y de los Trabajadores) hicieron contra el gobierno de Javier Milei. El primero había sido el 24 de enero, con el objetivo de oponerse a la “Ley Ómnibus” y el DNU 70/2023. Ahora se repitió la protesta por la “Ley Bases” y por la caída de los salarios frente a una inflación que, pese a la tendencia a la baja, sigue alta en medio de un nocivo proceso de recesión.
Lo concreto es que se llevó a cabo el segundo paro general en 151 días del Gobierno libertario y, a este ritmo, Milei se proyecta como el presidente que más paros generales tendría en la vida democrática de la Argentina, desplazando del primer lugar a Raúl Alfonsín. De hecho, con La huelga de enero Milei ya rompió un récord, que es el de haber tenido un paro a sólo 45 días de haber asumido y el promedio indica que hasta acá le han paralizado la actividad cada 75,5 días. En un ejercicio puramente matemático, y muy posiblemente improbable, Milei podría llegar a enfrentarse a unos 19 o 20 paros generales si las centrales obreras no distancian las protestas.
Como se sabe, Raúl Alfonsín sentó las bases democráticas en medio de fuertes crisis económicas y con una CGT que, conducida por el cervecero Saúl Ubaldini, fue inclaudicable en su lucha y en el enfrentamiento con el gobierno radical. Los 13 paros generales a Alfonsín no han sido alcanzados por nadie hasta ahora, pero el récord podría quedar en manos de Milei.
Saúl Ubaldini habla en la marcha que se realizó el 3 de agosto de 1984, primer paro general a Raúl Alfonsín.
En cuanto a celeridad de las centrales obreras por paralizar el país ante las nuevas gestiones sólo Fernando De La Rúa y Eduardo Duhalde, durante su interinato, tuvieron dos huelgas generales antes en los primeros 150 días. El radical en 147 días (24 de febrero y 5 de mayo de 2000) y el peronista en 148 jornadas al frente del Gobierno. En este último caso existe una controversia, ya que algunos toman como el primer paro contra Duhalde el convocado por la CTA el 29 de mayo de 2002 y no contabilizan el realizado por la fracción de la CGT conducida por Hugo Moyano, que se llevó a cabo una semana antes y fue de 12 horas. Entonces, para los primeros, el exgobernador Bonaerense tuvo sólo 2 paros generales y no 3 como contabilizan quienes anotan aquella huelga de mediodía.
Un informe elaborado por Marcelo Bermolén, director del Observatorio de la Calidad Institucional (OCI), publicado por Perfil, señala que “ningún presidente peronista (electo por mandato popular) recibió paros generales durante el mes de mayo. En cambio, todos los presidentes de gen no peronista recibieron paros durante el mes de mayo en alguno de los años de sus mandatos: el segundo paro general a Raúl Alfonsín fue el 23/05/1985; el segundo paro general a Fernando De la Rúa fue el 05/05/2001; a Mauricio Macri le realizaron el último paro general de su gestión el 29/05/2019. La excepción fue Duhalde, de signo político peronista, quién, investido por la Asamblea Legislativa para ejercer la presidencia, tuvo dos paros generales durante mayo con una semana de diferencia (22/05/2022 y 29/05/2002)”.
ENTRE EL PERONISMO Y LOS DEMÁS
En el mismo estudio se detalla que de las 44 medidas de fuerza multisectoriales realizadas desde 1983, 28 concentraron los presidentes no peronistas Raúl Alfonsín, Fernando De la Rúa, Mauricio Macri y Javier Milei, dos con mandatos parcialmente ejercidos (Alfonsín y De la Rúa), uno con mandato completo (Macri), y el restante en curso. Fueron 13 para Alfonsín, 9 para De la Rúa, 5 para Macri y 2 hasta ahora para Milei.
En cambio, 16 se llevaron a cabo durante las gestiones de cinco presidentes peronistas: Carlos Menem (2 mandatos) Eduardo Duhalde (interino), Néstor Kirchner (1 mandato) Cristina Fernández de Kirchner (2 mandatos), y Alberto Fernández (1 mandato).
Pero, en realidad, esos 16 paros se los hicieron a cuatro mandatarios. Menem tuvo 8 huelgas generales, Duhalde 3, Kirchner 1 y Cristina 5. El único Jefe de Estado sin sufrir los embates gremiales fue Alberto Fernández, y es un récord que difícilmente pueda igualar otro presidente y que se agiganta porque durante su gestión hubo serios problemas económicos que la posicionan sin dudas en el podio de las peores administraciones democráticas de la historia, y no sólo de la reciente. Los índices de pobreza e informalidad con los que se retiró el Gobierno anterior hacen poco menos que inexplicable la pasividad gremial y la benevolencia sindical con la que ni siquiera gozaron administraciones como las de Kirchner o Cristina.
Insólitamente, Alberto se cuelga una cucarda que hasta el 10 de diciembre del año pasado tenían sólo Juan Domingo Perón y Héctor Cámpora. Al fundador del Justicialismo nunca le hicieron un paro general durante sus tres gobiernos. Aunque sí hubo algunas huelgas de sindicatos puntuales. El primer parate multigremial durante un gobierno peronista, convoado por la CGT, se produjo el 27 de junio de 1975, cuando era presidenta María Estela Martínez de Perón. Oficialmente, fue llamado en rechazo al ajuste producido por el “Rodrigazo” y la homologación de paritarias, pero en el trasfondo también estaba la intención de sacar del Gobierno a José López Rega. Pocos días después, el 7 y 8 de julio, la Confederación General del Trabajo llevó adelante una protesta de 48 horas, por los mismos motivos de la primera, tanto los oficiales como los extraoficiales.
Sobre el comportamiento del movimiento obrero durante los mandatos de Juan Perón, en una entrevista publicada por la agencia Paco Urondo, hace ya varios años, el historiador y politólogo Pablo Vázquez recordó: “En el marco de los conflictos económicos que se dieron a fines del primer gobierno de Perón, que van desde tres malas cosechas a la reactivación europea que no nos permitía vender a precios tan caros, generando una retracción en el modelo de distribución. Eso se sintió, y llegaron los primeros conflictos. El más fuerte estaba dominado por la Fraternidad (ferroviarios)”.
“El peronismo tuvo, aunque parece una verticalidad absoluta con en Movimiento Obrero, varios paros durante el primero y el segundo gobierno, paros de los recolectores de residuos, de los barrenderos de Buenos Aires, de bancarios. Después, cuando la cosa se reactivó en el 53, ya los paros cesaron en su cantidad. Pero en lo que sería entre el 50 y el 53 fue la mayor escalada”, rememoró Vázquez. Y añadió que “lo mismo pasó en los 70. En el gobierno de Perón hubo paro de los docentes, justamente el sindicato liderado por el fallecido Pedro Bravo. También la movilización de las 62 para protestar por las medidas económicas después del Rodrigazo, que quisieron expulsar a López Rega”.
La CGT se creó en 1930; y se registra como el primer paro general de la historia convocado por la central obrera el que realizaron la CGT Catamarca y la CGT Independencia el 7 y 8 de enero de 1936 durante el mandato de Agustín Pedro Justo. Se considera su segundo paro general el del 18 de octubre de 1945, tras la movilización de trabajadores que había comenzado el día antes para exigirle al presidente Edelmiro Farrell la liberación del coronel Juan Domingo Perón.
Después, como ya se señaló, no hubo huelgas generales durante el mandato de Perón, y recién en 1955 se llama a un paro para pedir la libertad de dirigentes sindicales detenidos al Gobierno de facto comandado por Pedro Aramburu. Las huelgas sistemáticas contra administraciones no peronistas las empezó a sufrir Arturo Frondizi, quien en menos de cuatro años de mandato tuvo 5 paros generales, cuatro convocados por Las 62 Organizaciones Peronistas y uno (el último y de 72 horas) por la CGT.
Luego, José María Guido (Unión Cívica Radical Intransigente) tuvo una huelga general y su sucesor, Arturo Illia (UCR), cinco.
En la dictadura que sobrevino a Illia, la CGT le paralizó el país a Juan Carlos Onganía dos veces, a Roberto Levingston una, y a Alejandro Lanusse tres. Luego llegó Cámpora y no hubo convocatorias a protestas colectivas, que, como se dijo, retornaron en el 75 para expresarle descontento a “Isabelita”.
Movilización del 7 y 8 de julio de 1975.
En la Dictadura, las huelgas generales se desarrollaron por convocatorias de las clandestinas Comisión de los 25 (1 huelga a Jorge Videla) y CGT Brasil (1 a Roberto Viola, 1 a Leopoldo Galtieri y 3 a Reynaldo Bignone). Más tarde, con el Proceso en franca decadencia y a la luz de una democracia naciente, la CGT Azopardo y la CGT Brasil le paralizaron totalmente el país a Bignone el 6 de diciembre de 1982 y el 23 de marzo de 1983.
Después vino Alfonsín, y la historia ya contada. Lo que sigue dependerá de Milei y de su relación con el sindicalismo, que hasta ahora peor no puede ser.