3 de diciembre de 2024
LA TECLA PATAGONIA
Quiénes son los dueños de la minería en Santa Cruz
La Provincia es la mayor exportadora minera del país. En los primeros diez meses, la actividad generó ingresos por más de U$S1300 millones. Qué empresas operan y a quiénes pertenecen
Luego de más de 30 años de actividad, la minería en Santa Cruz se consolidó como líder en la producción y exportación de metales preciosos en Argentina, destacándose en la extracción de oro y plata. Sin embargo, a lo largo del 2024, la Provincia empezó a enfrentar nuevos retos y oportunidades vinculadas al cierre de minas, la atracción de inversiones y el fortalecimiento institucional del sector. En lo que va del año, Santa Cruz mantuvo su liderazgo en la producción de minerales, con una producción cercana a 700.000 onzas de oro y más de 15 millones de onzas de plata.
Las exportaciones mineras representan el 80% del total de lo que la jurisdicción gobernada por Claudio Vidal comercia al exterior, lo que generó ingresos superiores a los 1.362 millones de dólares en los primeros diez meses del año. Estos números posicionan a Santa Cruz como el mayor exportador minero del país, aportando el 42% a nivel nacional.
El crecimiento sostenido del sector también se reflejó en el empleo, con más de 9.000 puestos directos, provocando un efecto multiplicador en la economía regional. Esta dinámica laboral fue fundamental para localidades como Gobernador Gregores, donde el sector minero impulsó el desarrollo socioeconómico del municipio y de la zona.
No obstante, el cierre de la mina Manantial Espejo, operada por Pan American Silver, marca un hito en la gestión minera de Santa Cruz, siendo el primer proyecto en aplicarse bajo la Ley Provincial N° 3751 de cierre de minas. La normativa, sancionada en 2021 como la primera de esta natulareza en el territorio nacional, establece procedimientos específicos para la recuperación ambiental y la reestructuración socioeconómica de las comunidades perjudicadas, justamente donde el epicentro es la localidad de Gobernador Gregores.
El proceso de cierre, en el que participa activamente el Gobierno Provincial junto con empresas y la comunidad, busca mitigar el impacto económico mediante proyectos de desarrollo alternativos y la creación de nuevas fuentes de empleo.
El plan incluye actividades de remediación ambiental para asegurar que las áreas intervenidas sean recuperadas y puedan tener un uso alternativo en el futuro, cumpliendo con los estándares internacionales de sostenibilidad. En paralelo al cierre de Manantial Espejo, la administración santacruceña busca fomentar nuevas inversiones en el sector minero.
Hace unos días,una misión comercial sueca visitó la provincia para explorar oportunidades de colaboración en minería sustentable. Este intercambio, encabezado por la secretaria de Minería de la Provincia, Nadia Ricci, se centró en el desarrollo de tecnologías limpias y buenas prácticas, alineadas con los objetivos de sostenibilidad y responsabilidad ambiental.
Además, el gobierno provincial señaló que redoblará esfuerzos en conjunto con la estatal FOMICRUZ y el Servicio Geológico Minero Argentino (SEGEMAR) para impulsar la exploración en el Macizo del Deseado, región clave con potencial para nuevos descubrimientos.Este esfuerzo busca atraer inversiones y garantizar la continuidad del desarrollo minero en el mediano y largo plazo.
Por otra parte, como parte de las iniciativas para mejorar la gestión minera, el Banco Mundial presentó dos informes a la Secretaría de Minería : uno sobre el análisis del sistema catastral y otro de autoevaluación de la gestión minera. Los estudios fueron realizados por un equipo de expertos internacionales liderado por el geólogo español Enrique Ortega Girones, que cuenta con vasta experiencia en la gestión de catastros mineros a nivel global.
Según el consultor del Banco Mundial, Daniel Jerez, estos informes son fundamentales para mejorar la transparencia y eficiencia en la administración de concesiones mineras. La provincia busca implementar un plan estratégico que contemple la incorporación de recursos tecnológicos, la capacitación de personal y el aumento del presupuesto destinado a la gestión minera. El objetivo es no solo facilitar el otorgamiento de concesiones, sino también fortalecer el marco institucional para atraer inversiones y garantizar un desarrollo sostenible.
En esa línea, la adhesión provincial el Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI) también se presenta como clave para el desarrollo minero. Sin embargo, por falta de consenso gremial y político, la incorporación a la norma no se aprobó todavía en la Legislatura.
De esta manera, la minería de oro y plata en la provincia de Santa Cruz enfrenta el desafío de diversificar su matriz productiva y garantizar la sostenibilidad a largo plazo.
Con el cierre de Manantial Espejo y el impulso a nuevos proyectos en el Macizo del Deseado, la provincia busca consolidar un modelo que combine la inversión privada con el fortalecimiento institucional.