6 de agosto de 2009
Polémica decisión
El triple crimen y las dudas que se triplican
El principal investigador de la masacre de los polícias fue llamativamente pasado a retiro. Qué se esconde detrás. Entre los celos y el posible ocultamiento. La hipótesis de la droga y la indigación de los familiares
El inspector mayor Hugo Marcelo Rascov, consultor internacional en temas de seguridad e inteligencia, atesora un legajo de arrojo, valor y aporte crucial en el Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB). Respetado por sus pares, su currículum exhibe, entre otros lauros, la decisiva intervención que tuvo para terminar con el sangriento motín de Sierra Chica, en la Semana Santa de 1996.
Desde el 25 de julio del año pasado este hombre del SPB estaba en comisión en la UFI Nº 6, a cargo de los doctores Maribel Furnus y Marcelo Romero, para la investigación del triple crimen de la Planta Transmisora. La fiscalía había pedido expresamente su aporte, junto al de otros dos agentes.
Rascov era el oficial de enlace con las fuerzas federales y jefe de los investiga-dores para llegar a la verdad de este triple homicidio de los policías Pedro Díaz (45) y los oficiales Alejandro Rubén Vatalaro (27) y Ricardo Torres Barboza (26).
Tanto los familiares de las víctimas como fuentes judiciales coinciden en que el trabajo de Rascov fue, hasta el momento, uno de los más importantes en el camino para dar con los responsables de la masacre, consumada el 19 de octubre de 2007.
Pese a ello, el titular del SPB, Fernando Díaz, dispuso recientemente, y en forma unilateral e inconsulta, el pase a retiro del mayor Rascov, mediante la resolución 20.968/09.
La noticia sorprendió a propios y extraños. Incluso a los fiscales, quienes se enteraron de la noticia por los medios de comunicación. Los familiares, inmediatamente, exteriorizaron su indignación y sospecha.
“El apartamiento de Rascov genera un severo retroceso en el curso de la investigación y en la preparación del debate oral, tomando en consideración la prohibición de que intervengan en la causa funcionarios de la Policía de la Provincia, ya que hay miembros de dicha fuerza implicados”, dice el clarísimo comunicado oficial sobre el tema que dio a conocer la UFI Nº 6.
Ahora, bien, ¿por qué Díaz dispuso el pase a retiro de Rascov? Esa es la pregunta del millón, y la que genera un importante cono de opacidad.
Hay varios puntos que no cierran:
1.- Díaz nunca comunicó a los fiscales de esta determinación, a pesar de que Rascov estaba en comisión en la UFI Nº 6, mediante la resolución 4537, firmada por el propio Díaz. Ni siquiera los llamó por teléfono, ni antes ni después, para preguntarles si ya estaba cumplida la tarea de Rascov o si estaban conformes con ella.
2.- Rascov tenía agendados trabajos de inteligencia para los próximos días, como escuchas coordinadas con la SIDE. ¿Acaso Rascov estaba detrás de alguna punta que pudiera comprometer a Díaz?
3.- El trabajo de Rascov, junto con el de los fiscales de la UFI Nº 6, fue clave para dejar de lado la pista pasional del crimen (la que se abonó en primera instancia),
y ampliar las hipótesis. Gracias a su la-bor, la investigación dio un giro de 180 grados.
4.- Bajo la guía de Rascov empezó a co-brar fuerza la teoría de la droga detrás del triple crimen. En un operativo enca-bezado por este hombre, perros del SPB especialmente entrenados marcaron una caja dentro de un galpón de la Planta Transmisora que tenía la puerta entreabierta, en forma contundente. Todos los perros detectaron que allí había droga.
5.- Con Rascov como jefe de los investigadores se produjeron las detenciones, y luego la Cámara las confirmó. Es decir, hoy la hipótesis de la droga es la más fir-me para esclarecer el crimen.
6.- Con el avance de la investigación se libró la orden de captura para Gustavo Córdoba, alias Papupa, quien llamativamente sigue prófugo. En su momento,
el fiscal Marcelo Romero calificó a esta situación como “el prófugo más visto de la historia”.
7.- Rascov es relativamente joven, clase ‘60. Al momento de la decisión de Díaz, estaba ciento por ciento operativo, al servicio de la fiscalía.
8.- El titular del SPB no propuso a los fiscales a otro hombre para el reemplazo de Rascov, simplemente, lo hizo cesar en su cargo. Quizás Díaz no estaba al tanto de la resolución 1390/01, a través de la cual se prohíbe a la Policía investigarse
a sí misma.
9.- Se cree que existen celos por el trabajo realizado por Rascov, tanto en
el seno del SPB como en el de la Policía bonaerense, concretamente, el propio Stornelli.
¿Desconocimiento supino?
Las dudas continúan. Pero hay una muy fuerte. Fernando Díaz declaró: “Esta disposición no afecta en ninguna manera para que Rascov continúe con la investigación en la causa que lleva adelante la UFI Nº 6”.
“O Díaz tiene un desconocimiento su-pino del tema o se hizo el distraído”, le-yeron diversas fuentes consultadas por La Tecla. ¿Por qué? Un oficial retirado pasa a ser un jubilado más, sin facultades de ningún tipo para encabezar un allana-miento, realizar una escucha o incluso detener a una persona.
“Es lo mismo que ir a buscar al círculo de retirados o a la plaza donde los jubilados se distraen, al jefe de una investiga-ción para un tema tan complejo”, ejemplificó otra de las fuentes.
Para que quede claro, Rascov jubilado pierde todo tipo de operatividad, más allá de sus conocimientos y contactos. No se pueden emplear civiles para cuestiones de este tipo.
Díaz, a cargo del SPB desde 2005, debería saberlo.Una de las preocupaciones centrales
es que el trabajo de Rascov era determinante en la preparación para el juicio oral en esta medulosa causa que acumula 50 cuerpos. En esa instancia se podría arribar a la verdad. Quizás algunas personas no quieran que se sepa.