18 de mayo de 2011
ESTUDIO LABORAL
Un millón de jóvenes no estudian ni trabajan
Los jóvenes y el empleo evidencian una realidad despareja alcanzando el desempleo entre los chicos de 14 a 24 años, al 22 por ciento. Las razones por las que se ha llegado a esta situación, y el panorama de la juventud en el mercado laboral argentino. Datos de IERAL, Fundación Mediterránea
El mercado laboral en nuestro país, luego de la década del ’90, quedó en un estado tal de precariedad que le costará mucho a la Argentina sacar adelante, porque el neoliberalismo instaló un modelo de desprestigio y descrédito del trabajo, desvirtuando el rol del trabajador como uno de los seres fundamentales para el crecimiento de un país.
Hace unas décadas atrás, la Argentina era un país cargado de fábricas y producción, con pleno empleo. Hoy en día, lo único que se ve en tierras argentinas, son empresas con las persianas bajas, con las puertas cerradas, y una producción nacional cada día que pasa más agonizante.
El gobierno nacional viene manejando desde su asunción, un discurso productivista e industrialista. A pesar de eso, en los últimos tiempos la importación de productos ha avanzado notablemente, superando en gran forma las expectativas de las autoridades, que ven como la industria está descendiendo respecto a la industria extranjera, lo que también repercute en la baja del empleo en nuestro país.
Un estudio realizado por el Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL) de la Fundación Mediterránea , afirma que durante el año pasado 993.000 jóvenes de 14 a 24 años no estudian ni trabajan en el país, alcanzado el desempleo en esa franja etárea al 21,9 por ciento.
Mientras que el desempleo general llega al 7,4%, los más jóvenes viven una realidad totalmente diferente a la que se suele mostrar desde el gobierno nacional. El número de juventud sin empleo había bajado entre 2003 y 2004, ya que pasó de 846.000 a 822.000, pero luego fue en crecimiento, lo que generó desaliento entre los chicos que se cansan de una larga y frustrada búsqueda laboral.
Algunos datos sirven para graficar esta situación, como por ejemplo que el 15% es el desempleo previsto para este año para el segmento juvenil según la OIT ; estudios privados afirman que el 81% de los jóvenes no tiene cobertura de salud; el 70% de los menores de 25 años que ingresan al mundo laboral lo hacen en forma irregular; y que al 83% de los jóvenes no le hacen descuentos jubilatorios en su primer trabajo; resaltando aún más la precariedad laboral en el mercado juvenil.
Así se encuentra hoy en día la oferta laboral en la juventud argentina, totalmente debilitado a pesar del crecimiento económico manifiesto que viene teniendo el país en los últimos años, atacando directamente las oportunidades para entrar al mercado laboral y el ingreso de los jóvenes al mundo del trabajo.