15 de agosto de 2016
ENTREVISTA DE LA TECLA
Angelici, un “manual de poder”
Mano a mano con La Tecla, Julián Maradeo e Ignacio Damiani presentan el libro El Tano, la biografía no autorizada de un hombre fuerte del juego, la política y la Justicia
“A mediados del año pasado me llama ‘Nacho’ (Ignacio Damiani) y me propone hacer un perfil, una crónica acerca de la semblanza de Angelici. En ese momento me dije: ‘Angelici, presidente de Boca y qué más’. Me explica que a su vez es peso pesado en el mundo del juego y que tiene muchísima llegada a un tipo que por ahí a fin de año termina siendo Presidente (por Macri)”.
Las palabras pertenecen al periodista Julián Maradeo, quien, junto al ya mencionado también periodista Ignacio Damiani, es autor de El Tano, la biografía no autorizada de Daniel Angelici, obra que se encuentra a la venta en todas las librerías del país y que fue editada por Ediciones B.
“La acumulación de poder es lo que termina volviendo a Angelici un personaje muy atractivo para investigar a fondo. El tema es que nos fuimos encontrando con que se podía jugar a desafiar el género, a no hacer una biografía que comience hablando de cómo eran sus primeros picados en el barrio y termine hablando se su pelea con todo el mundo”, agrega Maradeo ante La Tecla.
-¿QUÉ ES LO MÁS INTERESANTE QUE TIENE ANGELICI?
ID: -El poder, sin dudas. Una caracterización que apareció en todos los entrevistados que lo conocen de primera mano es que tiene una sed inagotable de poder, incluso con todas las adversidades que enfrentó en su vida. Hay que destacar que es el hijo de un obrero italiano llegado a la Argentina en 1949. Viene de abajo. Es un militante barrial. Hizo todo el camino.
-A TODO ESTO, ¿QUIÉN ES DANIEL ANGELICI PARA USTEDES?
ID: -Institucionalmente, Angelici es el presidente de Boca, el flamante titular de la Liga Sudamericana de Fútbol y quien encabeza las discusiones en el Fútbol para Todos y la AFA; pero si se profundiza en el sujeto político y empresarial, hay que decir que es el vicepresidente del Colegio de Abo-gados de la Ciudad de Buenos Aires y un importante empresario de los bingos. Desde la década del 80, que se metió en la política militando en la Juventud Radical porteña y, en simultáneo, en el mundo de los negocios, siempre muy avispado. Tenía apenas veinte años. Desde allí avanzó, sin soltar la política ni los negocios.
JM: -Angelici es un manual de cómo construir poder en la Argentina moderna, en la transición del siglo XX al siglo XXI. El libro arranca describiendo al personaje, al militante político que a la vez desde muy joven invierte en los bingos; pero
a la vez que se van sucediendo los capítulos se ve cómo Angelici va armando una estructura que hoy por hoy se encuentra en su máxima expansión, que tiene una pata empresarial, otra política, muy vinculada a la Justicia, y una más relacionada al fútbol.
-HABLAN DE “MANUAL DE CONSTRUIR PODER” ¿TODO LEGAL O CON VETAS OSCURAS?
JM: -Por un lado es un emblema de la Juventud Radical que juega con Alfonsín y se mete a fondo en la política. En su entorno hay muchos de aquellos que estuvieron en la década del ‘80, de la mano de Franja Morada, en la presidencia de distintas facultades de la UBA y que luego ocuparon lugares institucionales de poder durante la presidencia de De la Rúa. Algunos, tras la caída de éste, desaparecieron. Otros lograron reciclarse en otros espacios. Por ejemplo: Hernán Lombardi, Darío Florian Richarte, Lautaro García Batallán, Claudio Niño. Ellos son viejos radicales que vienen desde los ‘80 y que, más allá de cómo se fueron dando las cosas, siempre ocuparon distintos lugares, aunque en los últimos años habían quedado al margen. Por otro la-do hay que tener en cuenta la solidez y la independencia relativa que le brinda la caja del juego, que es lo que lo hace distinto; porque un dirigente político que sólo tiene inserción en una estructura política puede tener un ascenso y luego declinar, como ha sucedido con tantos otros.
-¿POR QUÉ CARRIÓ NO LO QUIERE?
ID: -No estamos de acuerdo con el mote de “operador político” que le puso la doctora Carrió. Reducir la figura de Angelici a esa caracterización es banalizar el análisis del poder con el que cuenta. Así estaríamos dejando de lado su condición de empresario, su condición de presidente de Boca y de lo influyente que es en la mesa chica de Macri. Por supuesto que hay que decir que si bien el mote fue una construcción mediática, algo de verídico tiene. En un rastreo que hicimos tiene que ver con el análisis que desde donde vienen peleándose, Claudio Niño, amigo de la adolescencia y militante radical, nos decía que, como mínimo, el enfrentamiento viene del Comité radical de la Ciudad de Buenos Aires en la década del 90. El dice que no sabe por qué está enojada Carrió.
ENTREVISTA COMPLETA EN LA EDICIÓN 688 DE REVISTA LA TECLA