La Tecla
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Algunos sí y otros no. La puja por el bono de fin de año calienta la previa de diciembre en el territorio bonaerense y en los municipios se empieza a librar la batalla por obtener el beneficio económico.
Como una especie de adelanto, fueron tres los intendentes que le ganaron de mano a un posible conflicto. Entre ellos, el mandamás de General Villegas, Eduardo Campana, que otorgará $2.000. En tanto su par de San Nicolás, Nicolás Passaglia, abonará una suma de 3.500 pesos y Alejandro Cellillo de General Alvear hará lo propio pero con $2.000.
Pero por fuera de los lugares donde es un hecho que se implemente, los sindicatos empezaron a batir el parche para logara el plus económico.
En efecto, en Junín, días atrás los empleados municipales le pidieron mediante una nota un bono de fin de año al intendente de cambiemos, Pablo Petrecca, por $3.000. Según describieron los propios empleados: "En vista de la situación económica de nuestros compañeros, solicitamos, como única vez, un bono navideño de $3000, teniendo en cuenta los aumentos en la economía y el bajo ingreso de estos".
En Tandil, Roberto Martínez Lastra, Secretario General del Sindicato de Trabajadores Municipales adelantó que pedirán un bono de fin de año que esperan cobrarlo antes de navidad aunque no precisó el monto del mismo.
A varios kilómetros de ahí, en Pilar, el intendente Nicolás Ducoté (Cambiemos) ya negó la posibilidad de que exista un bono de fin de año en materia económica y desde ATE ya alzaron la guardia para que se otorgue un símil bono pero de mercadería y estiman que cubra entre $1.500 y $2.000. Dicho ejemplo, se replicará en Exaltación de la Cruz.
En Rivadavia, el intendente Javier Reynoso, parece que no tendrá reclamo alguno en torno al famoso bono. Ese escenario se debe a que con motivo de festehjarse el día del Empleado Municipal, desde las arcas de su gestión le regalaron a cada trabajador un bono de $2.000.