25 de abril de 2018
TARIFAS
Las tasas municipales: una "anarquía" que no se traduce en recursos
La reducción de impuestos provinciales que se cargaban sobre las tarifas puso sobre la mesa el cobro de gravámenes municipales que, en muchos casos, rozarían la ilegalidad. En el afán de recaudar, los Gobierno locales se ven problemas. Cuáles son los niveles de participación en los recursos de acuerdo al análisis realizado por el titular del Tribunal de Cuentas de la Provincia.
La decisión de la gobernadora María Eugenia Vidal de eliminar impuestos en las tarifas de agua, luz y gas puso de manifiesto una polémica que ya lleva varios años: el cobro de tasas municipales, atadas a los servicios.
En el afán de recaudar, son muchos los municipios que se ven obligados a incluir impuestos que, en algunas ocasiones, rozan la ilegalidad. Ahora, deberán decidir si continuar con el cobro o seguir el ejemplo del Gobierno bonaerense.
Actualmente, los municipios tan sólo tienen el 6 por ciento de participación en los recursos del Gobierno, mientras la Provincia posee el 20 por ciento, siendo la Nación quien capitaliza la mayoría con el 74 por ciento. En comparación, en los países desarrollados los gobiernos locales tienen entre 21 y 26 por ciento de participación.
En cuanto al gasto, las municipalidades tienen 11 por ciento de participación; la Provincia un 47 y la Nación un 42 por ciento; siendo en los países desarrollados el 32, 42 y 26 por ciento, respectivamente.
Por ello, el presidente del Tribunal de Cuentas, Eduardo Grinberg, destacó en el seminario organizado por La Tecla, la necesidad de definir potestades tributarias municipales especificas, y “terminar con una política anárquica de tasas, confusa, duplicada e hipócrita que intenta disfrazar un esquema impositivo”.
“En algunos municipios hasta se gravaba la carga de nafta. Evidentemente hay cosas que corregir. En ese sentido, todas las jurisdicciones están yendo al mismo lugar. En materia de cigarrillos, combustible y bebidas alcohólicas hay impuestos internos y después se empezaron a subir todos. En definitiva, el consumidor pone el auto al lado del surtidor, paga y se va. Y está pagando el impuesto municipal. Espero que esto traiga un emprolijamiento en las competencias, pero no se deje en desequilibrio a las jurisdicciones que dependen de esta recaudación”, destacó el titular del organismo de control.
Y añadió: “El Gobierno local tiene que terminar con esta anarquía de tasas. Distinto es el pago de impuestos, esto tiene que ver con la prestación de un servicio. Si uno empieza a analizar las tasas, esto hay que repensarlo por un sistema sincero desde el punto de vista tributario. Se nos viene encima la problemática provincial y nacional. El país se merece una discusión”.
“Las fuerzas están en otro lado, estamos hablando de pactos fiscales donde las provincias están sometidas al orden nacional. Esto involucra a todos, a los municipios, a las provincias y a la Nación”, concluyó.