17 de agosto de 2018
ESTILO DE VIDA
Alertan sobre la obsesión por cirujía plástica causada por Snapchtat
Muchos pacientes jóvenes piden a los cirujanos 'retocarles' la cara para verse como en su imagen idealizada por alguno de los filtros de Snapchat. Los médicos califican esta tendencia como un trastorno mental al que ahora dan por llamara "dismorfía Snapchat".
La popularidad de los medios sociales basados en fotografías y de los filtros utilizados para un rápido retoque de los selfies ha impactado en la demanda de los servicios de cirugía plástica.Expertos de la Escuela de Medicina de la Universidad de Boston revelaron que el uso de los filtros de la red social Snapchat provocó una alarmante obsesión en las personas.
El conocido trastorno dismórfico corporal, que se manifiesta cuando las personas están preocupadas más allá de lo normal por algún supuesto defecto o falta de perfección, adopta ahora en muchos jóvenes una nueva forma y dimensión: la "dismorfía Snapchat". Precisamente esta aplicación, y también Facetune, están detrás de la "nueva realidad de la belleza" y del cambio en la demanda que denuncian los especialistas.
Antes la mayoría de los potenciales pacientes solicitaban una rinoplastia, algo que implica retocar y 'afeitar' el puente de la nariz, recordó la coautora del ensayo y directora de un centro dermatológico, Neelam Vashi, en declaraciones al sitio web Inverse. Ahora piden aumentar el tamaño de los labios o de los ojos, reordenar las proporciones del rostro, hacerlas más simétricas, tratando de imitar lo que muestran los filtros de Snapchat.
"La gente trae fotos de sí misma en ciertos ángulos o con ciertos tipos de iluminación", explicó. Algunas de esas imágenes difieren considerablemente de la realidad, y generan en los pacientes jóvenes "expectativas poco realistas", porque "tratan de parecerse a una versión fantaseada de ellos mismos". Son de antemano proclives a esa clase de pensamientos obsesivos, y el atisbo de 'perfección' que les ofrecen estas aplicaciones los impulsa a actuar.
Las plataformas de medios sociales impulsan a los usuarios a que perciban y valoren sus cuerpos desde el exterior, algo que puede "llevar a la cosificación del cuerpo", estimó la experta. Esta práctica, en su opinión, afecta la salud y el bienestar mental.