16 de octubre de 2024
LO QUE VIENE
Máximo puso sobre la mesa la re-re de los intendentes y pidió discutir el tema
El presidente del PJ dijo en una reunión partidaria que debe discutirse la caducidad de los mandatos, una demanda de varios alcaldes que, con el marco legal actual, no pueden reelegir en 2027. También habló de abrir el debate para eliminar las elecciones intermedias y que se elija todo cada cuatro años.
¿Cómo y cuándo? Dos interrogantes para un solo fin: dejar sin efecto la ley que prohíbe más de dos mandatos consecutivos de los intendentes y legisladores. El tema se ha convertido en una muda obsesión en el oficialismo, pero también inquieta en la oposición. Casi el 90 por ciento de los jefes comunales no puede, de acuerdo al marco legal vigente, reelegir en 2027. La primera consecuencia es que se genera un cuello de botella en la salida hacia arriba, debido a que no hay tantos lugares en las nóminas legislativas.
La vía de retocar otra vez la ley no parece tener, por ahora, el consenso legislativo. En el Parlamento hasta sectores del oficialismo quedaron atrapados en la disyuntiva de tener que borrar con el codo lo que escribieron con la mano. Por caso, en esa encrucijada se encuentra el Frente Renovador, impulsor en su momento de las limitaciones de los mandatos.
La salida más elegante sería introducir el tema en el marco de una reforma política que atienda otras cuestiones (por ejemplo, Boleta Única de Papel), lo que permitiría plantar la idea de que ante un régimen electoral nuevo también se empiece de cero, otra vez, con el conteo de los mandatos. Solo hablar de las re-re sin otra cuestión superadora del esquema electoral será difícil de justificar y evitar el escarnio público en momentos donde la política padece de un fuerte rechazo social. Sea cual fuere el marco en el que se buscaría la reforma de la ley debería hacerse antes de fin de año, o a lo sumo durante los primeros tres meses de 2025.
Otra alternativa es la judicial: que el año próximo un legislador sin posibilidades de volver a ser elegido recurra a la Justicia para que haya una interpretación de inconstitucionalidad de la norma, y siente un precedente que explotará en amparos dos años después. Esa idea ya se sondeó antes de que se modificara la ley en diciembre de 2021, pero con la modificación legislativa no fue necesario.
El Día de los Santos Inocentes de 2021 el Parlamento provincial sancionó la ley 15.315, promulgada en el Boletín Oficial de la provincia de Buenos Aires el 13 de enero de 2022, por la cual se modificó el límite a las reelecciones de intendentes/as, concejales/as, consejeros/as escolares y legisladores/as. Estableció que los mandatos que se hayan iniciado como resultado de las elecciones del año 2017 y 2019 serían considerados como primer período a los efectos de la reelección. En el caso de los mandatos iniciados en 2021, la normativa explicitó que “se computará como primer período sólo en el caso que no haya ejercido un mandato inmediato anterior”.
Dos años después el problema vuelve a captar la atención. Sin reelección de los intendentes no hay lugar para todos en las nóminas legislativas, primera vía de escape para quienes deben buscar nuevos rumbos. Además, también son muchos los legisladores que quedan sin chances de renovar sus bancas. El dilema es transversal para los partidos más tradicionales.
Por eso, Máximo Kirchner lo puso sobre la mesa en la reunión realizada en Monte Hermoso hace ya unos días. El presidente del PJ bonaerense y líder de La Cámpora dijo que “habría que discutir el tema de las reelecciones de los intendentes”, y si bien no ahondó mucho más en el asunto ni puso plazos para que esa discusión se dé, dejó en claro cuál es su postura al respecto. Hay quienes aseguran que a La Cámpora no le conviene correr otra vez los límites de los mandatos porque son pocos (3) sus intendentes los alcanzados por la restricción en el próximo turno electoral. Sin embargo, tampoco le conviene que haya una presión mayor sobre las listas legislativas, donde la Orga se ha ganado cada vez más lugar. Además, Máximo, en su rol de presidente del PJ también tiene que contener a los alcaldes del partido.
El planteo de “discutir” el asunto de las reelecciones fue tomado con mucha atención por los presentes, pero no fue el único cambio electoral que planteó el diputado nacional. Kirchner dijo en la misma reunión que otra de las cosas que debe conversarse en la Provincia es que haya una elección cada dos años. Palabras más, palabras menos, sostuvo que “sería mejor votar cada cuatro años -que se renueve la totalidad de la Legislatura y de los Concejos junto a la renovación de los Ejecutivos- porque no se puede vivir en un proceso electoral permanente”, debido a que inmediatamente después de una elección la política ya se empieza a inquietar por el comicio que vendrá 24 meses después.
El planteo de Máximo, de poner sobre la mesa la falta de reelección indefinida que para muchos “facilitaría las cosas” y para otros “es un privilegio de casta”, aparece por primera vez de boca del presidente del PJ bonaerense. Quienes estuvieron en la reunión tomaron nota, del mismo modo que prefirieron que esa parte de la charla quedara entre esas cuatro paredes y como tarea para el hogar, con la premisa que no trascendiera demasiado que allí se había hablado del tema. Sigue siendo un tabú de la política, pero que cada vez queda más al descubierto. Es que los tiempos se acortan y a los jefes comunales, sobre todo del peronismo, y fundamentalmente del Conurbano, empieza a agarrarles el apuro.