Argentina
Sábado, 27 abril 2024
NOTA DE TAPA
13 de diciembre de 2022

Los problemas para el oficialismo sin Cristina en la lista

La vicepresidenta anunció que no competirá en 2023 por ningún cargo. Una bomba para la militancia, que la clama, y para el peronismo bonaerense, que la quiere en una boleta. La opción Kicillof, las primeras repercusiones y el peso que tiene su nombre en la Provincia

Por Hernán Sánchez

“No voy a ser candidata a nada”, dijo, y le sacó el perno de seguridad a la granada que es el Frente de Todos sin ella como partícipe en una boleta. Cristina Fernández renuncia a ser opción electoral pero quiere mantenerse como la líder y conductora de un espacio que, sin su presencia centralizadora, podría estallar en mil esquirlas. Tampoco esa es una tarea sencilla cuando se descarta ser una opción en los comicios. Fue un golpe duro para la militancia, que se montaba en un operativo con el deseo de verla nuevamente Presidenta o, por lo menos, tenerla en la boleta de senadores nacionales por la provincia de Buenos Aires. También fue un golpe duro para la dirigencia, sobre todo para el ultrakirchnerismo y para aquellos que se escudan en ella, como Axel Kicillof.

Enojada y algo abatida, Cristina hizo catarsis tras el fallo judicial que la condenó a seis años de prisión e inhabilitación para ocupar cargos públicos por la llamada Causa Vialidad. Pero en ese fárrago largo y nervioso, en el que cargó contra la corporación policial y mediática a la que atribuye la mayoría de sus males, le dio un mensaje a su propia dirigencia. Y lo repitió horas después, más calmada, en la cena que tuvo lugar en Ensenada. Allí habló del bastón del mariscal que alguien debía tomar, porque, en definitiva, Cristina siente que no la defendieron como ella pretendía, y el reproche llega hasta su propio hijo, líder de La Cámpora y presidente del PJ bonaerense. “Falta orden, falta la ejecución de lo que la conducción reclama”, le dijo a este medio un camporista,en una especie de autocrítica sobre cómo se desarrollan las discusiones y las acciones dentro de la alianza, e incluso dentro de la propia organización K.

El corrimiento electoral de Cristina “nos pone a todos en una situación de hacernos cargo, de poner el coraje que debe tener cada uno de los dirigentes para dar la discusión que hay que dar, que no es de tipo electoral o que está teñida de una especulación en función del 2023; porque hoy se llama Cristina Fernández, ayer se llamó Néstor Kirchner, y también se llamó Raúl Alfonsín y Juan Perón. Cualquier dirigente que intenta representar intereses populares y que se atreve a enfrentar el statu quo, corre el riesgo de ser condicionado. Y hoy, claramente, quien condiciona es un factor de poder mafioso que conduce (Héctor) Magnetto y que, lamentablemente, no permite un natural desenvolvimiento del sistema democrático”, espetó el jefe de bloque de diputados provinciales del FdT, César Valicenti. Ahora, el relato K tiene un mensaje concreto para dar de cara a la sociedad.

“Lo que nos queda en claro es que no va a ser candidata ni por casualidad. Si hay algo que tiene es palabra. Salvo que pase algo desmesurado, como un operativo clamor enorme, que vayan gobernadores, intendentes y dirigentes de mucho peso a pedirle por favor que sea candidata. Nos encantaría que lo fuera, pero lo que planteó, seguramente lo cumplirá”, reflexionó ante La Tecla un dirigente de Nuevo Encuentro. En sintonía con ello se expresó Andrés Larroque, ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense: “Conociéndola, creo que la decisión de no ser candidata es terminante”. El efecto directo de Cristina fuera de cualquier boleta repercute mucho en la provincia de Buenos Aires, donde está la base del voto duro K y desde donde se cimentan triunfos nacionales.

El anuncio anticipado de Cristina es una mala noticia para Axel Kicillof, a quien muchos empiezan a ver como la opción más pura y potable para candidato a Presidente en 2023. Pero Kicillof rehúye de esa opción que, sabe, también es empujada por un sector del intendentismo, que lo quiere fuera de la Provincia con la ilusión de poner uno propio en el sillón de Dardo Rocha. Frente a este escenario, el Gobernador profundizará, esta y las próximas semanas, su campaña reeleccionista. “No cambia nada por el momento, hay que seguir gestionando y laburando”, afirmó uno de los más estrechos colaboradores del mandatario. “Las candidaturas se definen el año próximo y la centralidad en la decisión la sigue teniendo Cristina Fernández de Kirchner, independientemente de la persecución y
esta falsa condena”, agregó.

De todos modos, en el entorno de Kicillof reconocen que “preocupa que Cristina no esté en la boleta, los votos son de ella”. Si bien las encuestas marcan que el titular del Ejecutivo provincial es quien mejor fideliza la transferencia de sufragios entre la actual vicepresidenta
y algún dirigente del espacio, no menos cierto es que sin ella en la grilla la cuesta es más empinada en el Conurbano, donde el PJ K basa todas sus esperanzas en retener el Gobierno provincial y en arrimar para una posible continuidad al mando del país. 

En ese sentido, la posibilidad de Kicillof candidato a Presidente tiene un lado A y un lado B. El A es, como se señaló antes, que aparece como la alternativa natural, que responde directamente a Cristina y que ya está instalado. El B, y al que se aferra el Gobernador, es que sacarlo de la Provincia implicaría poner en riesgo un territorio que, si bien aparece peleado en las encuestas, se puede conservar y funcionar como el reservorio de la dirigencia K. ¿Por qué razón lo mandaría Cristina a una pelea con amplias chances de perder sacándolo de una disputa en la que tiene buenas chances de ganar? La vice es muy pragmática en ese sentido, y muchos dirigentes han escuchado de su boca la frase “tráiganme uno que mida mejor y vemos”. Hasta ahora, no aparece.

“La gestión de Axel va por buen camino en toda la Provincia. En el interior se mueve como pez en el agua, y eso marca una diferencia con quienes se centran solo en el Conurbano”, comentó un ministro provincial, que además reconoce que “la estrategia del intendentismo es presionar para tener mejores condiciones en este contexto. Incluso hasta pedirían adelantar elecciones con tal de mandar a Axel como candidato presidencial y ser carne de cañón”. Allí parece estar la madre de las batallas respecto a cómo se resolverán las candidaturas el año que viene, y con el renunciamiento de Cristina, los que empujan la teoría de la salida para arriba se envalentonan. ¿Hasta dónde las tensiones y la falta de candidatos naturales que, extrañamente, padece el peronismo pueden mellar la unidad del Frente de Todos? Dependerá mucho también de cómo Cristina ejerza el liderazgo y pueda sostenerlo, pese a decir que no competirá electoralmente.

Mientras tanto, Sergio Massa, quien hasta ahora hacía trascender que no quería ir por la Presidencia el año que viene, ya no descartaría tanto esa posibilidad, por la esperanza que le dan dos datos de las encuestas: su negativa sigue alta pero dobló la positiva, y la  sociedad empieza a verlo como alguien serio que puso la cabeza en el lugar más difícil en el momento más complicado. Como contrapartida, desde el propio massismo suelen  desalentar esta chance a partir de que la pelea contra la inflación se sigue perdiendo, y aunque comience a acomodarse en los próximos meses, no ven posible que alcance como para que el tigrense pueda ganar la Presidencia. Y sin chances concretas no se prestará a una derrota segura.

“El Presidente puede ser candidato, y muchos otros dirigentes también están en condiciones de serlo y competir”, indicó Gabriel Katopodis, como para no bajar definitivamente de la pelea a Alberto Fernández, aunque casi todos entienden que esa salida es cada vez más pequeña. Pero, sin dudas, el anuncio de Cristina sacudió el tablero político y movilizó al Frente de Todos, que ahora tiene verdaderos desafíos para encontrar a los mariscales, y que no sean mariscales de una derrota.


Los problemas para el oficialismo sin Cristina en la lista


JUAN JOSE MUSSI - INTENDENTE DE BERAZATEGUI
“Cristina no ha renunciado a su rol en el Frente de Todos”

El intendente de Berazategui y  dirigente histórico del peronismo, Juan José Mussi, habló sobre el escenario político actual tras el renunciamiento de Cristina Fernández de Kirchner.
“Prefiero que sigamos hablando de la injusticia que hay en la Argentina porque ya es muy difícil hablar de justicia. Distingo entre los jueces probos y los que están al servicio de una política que, cuando estuvieron con el Gobierno militar y el de Macri, lo único que hicieron fue atentar contra los intereses de los que menos tienen”, manifestó el alcalde. 

Asimismo se mostró comprensivo y sostuvo: “Entiendo el momento de Cristina y repudio totalmente lo que ha hecho la Justicia en estos días”.

En cuanto a posibles diferencias en el Frente de Todos por cómo se defendió a Cristina, dijo que “la gente se pronunció como pudo; todos lo hicimos como pudimos, utilizando los medios que tenemos, pero es muy difícil que eso se note cuando tenés a los grandes medios de difusión todos los días diciendo que los antidemocráticos somos nosotros”.

Respecto de las consecuencias de la decisión de CFK, Mussi aseguró que “Cristina ha dicho que renuncia a la candidatura y nada más que eso. No ha renunciado a su rol. Ella es un factor importantísimo dentro de lo que es el Frente de Todos y el PJ”. Entonces, finalizó: “Quienes la conocemos no creemos que ella renuncie a ese rol, sino que va a seguir luchando”.


JULIO BURDMAN - POLITOLOGO
“La decisión de Cristina deja al peronismo con cierta orfandad”

El politólogo Julio Burdman dialogó con La Tecla acerca del impacto de la decisión de la vicepresidenta, Cristina Fernández de Kirchner, de no salir a la cancha en 2023 para la disputa electoral. De esta manera puso el foco en la capacidad de liderazgo que podría tener sin un cargo electo por el voto.

En ese aspecto manifestó que “es una decisión suya. Pudo haber dicho que iba 
a ser candidata y encarar una lucha para no ser proscripta, pero decidió lo contrario. Planteó un renunciamiento, y eso deja al peronismo con cierta orfandad”.

Respecto de un nuevo escenario político, el analista aseguró: “Por un lado ella amalgama a todos detrás de su figura, y por otro decide alejarse de la disputa por un cargo. Tiene a todos sumidos en una confusión”.

En cuanto a las candidaturas de cara al 2023 consideró que “es muy temprano para analizar qué puede suceder para las elecciones. Los otros candidateables forman parte de una ecuación de continuidad. Sergio Massa, Axel Kicillof, Wado de Pedro y Alberto Fernández están en esa franja”.

Más adelante, Burdman explicó que “no queda claro si la Cristina que re-nunció a ser candidata es la que va a ordenar el Frente de Todos. Es una duda que surge sobre la base de cómo puede ordenarlo ella desde esa posición”. Luego recordó que “toda la experiencia que tenemos es con ella conduciendo. Pueden aparecer otros liderazgos que quieran reclamar las condiciones de ordenador”.

Sobre la situación en la provincia de Bue-nos Aires dejó el interrogante abierto: “Kicillof es candidato a la reelección y uno puede preguntarse si el vacío de la renuncia de Cristina no lo convoca como candidato a Presidente”.

Asimismo expresó que “si Máximo Kirchner quiere ser candidato a Gober-nador sería uno más que competiría por la continuidad del cristinismo, y lo que está en cuestión ahora es si el cristinismo es o no el proyecto del peronismo contemporáneo”.

Por último afirmó: “Massa dijo que no es candidato a nada, y merece ser considerada su palabra. Es un precandidato posible en la medida que tenga éxito su gestión y cuente con el apoyo de Cristina”.


Los problemas para el oficialismo sin Cristina en la lista


TERESA GARCIA - JEFA DEL BLOQUE FDT EN EL SENADO
“Nosotros tenemos que decir para qué queremos gobernar”

-¿Qué significa que Cristina Fernández no sea candidata, sobre todo para la provincia de Buenos Aires?

-Primero, me parece que significa un problema serio para todos los partidos políticos que vayan a competir el año que viene, porque la intencionalidad que tuvo el fallo fue proscribirla. Desde el primer día, porque todos sabíamos que la prisión es inviable, y ella misma sabía cómo iba a ser el fallo.

-¿Y no terminó por darles la razón al decir que no será candidata?

-No. Me parece que elevó el juego polí-tico democrático mucho más alto. Ahora hay que ordenar al peronismo, ponerlo en clave electoral para el año que viene, pero para eso hay que decir para qué. Nosotros tenemos que poder decir para qué queremos gobernar. No se trata de armar un frente electoral para ganar una elección, porque la gente es la que está sufriendo.

-¿Y el quién?
-El quién, a mí mucho no me importa. Si no es Cristina, mucho no me importa, porque yo con ella tengo la absoluta certeza de que interpreta el sentir popular, lo que la gente quiere; por eso hay muchos compañeros que están muy tristes. 

A mí, el candidato o la candidata que vaya a ser no me interesa, sí quiero que ella siga conduciendo. Nosotros queremos gobernar para hacer la vida de la sociedad un poco mejor, para transformar la realidad y la injusticia, para que haya un esquema de crecimiento; 
no para hacer un frente electoral que  nos disponga a nosotros mismos en una banca, porque eso es muy pequeño.

-Pero en clave electoral ella es muy importante.

-¿Y quién dijo que no va a estar?

-Ella. Y mucha gente la espera ver en la boleta, por más que sea la conductora política.

-Ella va a hacer lo que ha hecho hasta ahora.

-¿Tiene esperanzas, todavía?

-Absolutamente.


CESAR VALICENTI - JEFE DE BLOQUE DE DIPUTADOS FDT
“El foco está puesto en rediscutir el sistema institucional democrático”

-¿Qué significa el renunciamiento de Cristina a ser candidata?

-Lo que uno cree es que Cristina, con eso, le está diciendo a la dirigencia, al poder político y, también, a estos factores de poder que la condicionan, que el problema no es ella. Ella puede no ser candidata, pero acá cualquiera que se atreva a representar los intereses que ella defiende va a tener los mismos problemas. Cristina, al correrse de la escena electoral del año que viene, lo que está manifestando es que este factor de poder mafioso que condiciona a la democracia y a los actores políticos, va a seguir. Entonces, la discusión es otra. No si es Cristina candidata o no, la discusión es que tenemos que rediseñar el sistema democrático para que se puedan expresar todos los espacios políticos de una manera libre, sin aprietes ni condicionamientos mafiosos.

-Pero para llegar a ese consenso hay que involucrar a toda la política, y eso, en este escenario, parece difícil.

-Es muy difícil porque hay actores de la oposición que intentan tener un acercamiento a pensar políticas públicas de largo plazo, y el modo de disciplinamiento interno que ha elegido Cambiemos ha sido perseguir a esos dirigentes. Le pasó a (Facundo) Manes cuando se salió un poquito de la raya y expresó una opinión diferente a la que planteaba Mauricio Macri; enseguida lo corrieron de los medios de comunicación y lo criticaron. Los mecanismos de disciplinamiento interno de Cambiemos, a través de las espías, de los carpetazos y las operaciones de prensa, también son un factor negativo hacia la democracia, porque no permiten el desenvolvimiento natural de cualquier espacio político. Y, como decís, todos los espacios tienen que rediscutir ese diseño democrático en el que pueda haber libertad de expresión política.

-Pero es innegable el valor electoral que tiene Cristina. ¿No es una dificultad a la hora de construir candidaturas y estrategias?

-Ya va a haber tiempo para discutir en el plano electoral, hoy el foco está puesto 
en rediscutir el sistema institucional democrático, y el rediseño de un proyecto político en función de lo que se está viviendo.



Los problemas para el oficialismo sin Cristina en la lista


SUSANA GONZALEZ - DIPUTADA DEL FDT
“Fue un golpe duro que diga que no va a ser candidata a nada”

-¿Qué impacto tiene para el kirchnerismo de la provincia de Buenos Aires que Cristina adelante que no va a ser candidata?

-Es un impacto muy grande. Pero ella dijo que no va a ser candi-data, no que va a dejar de hacer política, y para los que militamos el proyecto que encararon Néstor y  ella, que sea nuestra conductora es una gran herramienta, una gran inyección. A mí me hubiera encantado Cristina Presidenta, pero quién le puede pedir más a una compañera que puso el cuero y la familia, y que lo sigue poniendo aun con las alevosías y barbaridades que se están viendo en este país, con este partido judicial que está tan decidido a ir por todo, y por todos. Los que creen que a ellos no les va a tocar están un poco ciegos con lo que está pasando. Para mí, en lo personal, fue un golpe duro que diga que no va a ser candidata a nada, pero no le puedo pedir más nada.

-En lo estrictamente electoral, una cosa es cuando ella está en la boleta y otra cuando no está. ¿Cómo se suple eso?

-Es una cuestión que ahora tendremos que empezar a debatir y a trabajar, para ver cómo encaramos las elecciones. Queda un tiempo. Y aunque ella no esté en la boleta, el sol siempre está.


WALTER ABARCA - DIPUTADO DEL FDT
“El problema somos el resto de los dirigentes políticos”

-¿Qué significa para el peronismo de la Provincia que Cristina anti-cipe que no va a ser candidata?

-Que no va a ser candidata no significa que deje la conducción política. Cristina es y va a seguir siendo la diferencia. Tiene la capacidad transgresora de marcar el camino constantemente, como lo hizo el 17 de noviembre, cuando habló de la seguridad, de los grandes conglomerados y de los principales problemas que tiene la provincia de Buenos Aires. Es muy pronto todavía para hablar de candidaturas o no. Ella ha dicho montones de veces “voy a estar donde tenga que estar”. Lo del martes, para mi gusto, es una postura apresurada, pero ella vive marcando el camino. El problema somos el resto de los dirigentes políticos.

-¿Por qué?

-Porque no tenemos la capacidad transgresora que tiene Cristina, porque no tenemos la capacidad del debate político que tiene Cristina y no tenemos la capacidad de dar los debates que Cristina plantea públicamente.

-¿Y cómo piensan solucionarlo?

-Con mucho debate. La política en general, no solo el Frente de Todos, ha perdido capacidad de debate político. Por ejemplo, ¿cuál es el plan de desarrollo de la provincia de Buenos Aires? No se discute mucho.

-¿Ya se tiene que empezar a discutir quiénes serán los candidatos?

-Todavía es temprano. Hay otras cuestiones para discutir; por caso, cómo se genera crecimiento económico para morigerar la inflación, y aunque tenemos un 
contexto internacional súper adverso, debemos generar crecimiento económico. Si la economía no crece va a ser muy difícil bajar la inflación, y eso se hace con conducción política. Tenemos la necesidad de ponernos de acuerdo todos, oficialismo y oposición. Lo que pasó en el Congreso de la Nación es un reflejo de lo que le pasa a la política en Argentina, y de la que la provincia de Buenos Aires no es ajena, porque nosotros tampoco podemos ponernos de acuerdo para encontrar una agenda para sesionar. La dirigencia tiene que empezar a encontrar acuerdos básicos; de mínima, de funcionamiento de los órganos de la democracia. 


GABRIEL KATOPODIS - MINISTRO DE OBRAS PUBLICAS
“Vamos a encontrar a los ordenadores que van a representarnos”

“Nos sorprendió a todos y marca con mucha claridad cómo se para en el escenario político. Cristina Fernández no necesita fueros ni candidatura para liderar. Va a hacer todo lo que haga falta para que el peronismo gane las elecciones. También quiere enfrentar a esa mafia, a ese Estado paralelo, como ciudadana militante”, aseveró el ministro de Obras Públicas de la Nación, Gabriel Katopodis.

“En lo electoral, contamos con Cristina como representación simbólica de nuestro proyecto político y vamos a encontrar a los ordenadores, los hombres y las mujeres que van a representarnos”, puntualizó el exintendente de San Martín.

Además sentenció que “la unidad del Frente de Todos la vamos a ir logrando a partir de que tengamos políticas y decisiones correctas. El peronismo se ordena cuando a la gente le va bien y cumple su contrato electoral”.




 

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