El 2024 es un año muy duro para la clase media y los sectores populares, con varias aristas que pueden fundamentar esta afirmación. Pese a la baja de la inflación, principal factor de la derrota del Frente de Todos y la llegada de Javier Milei al poder, la pobreza aumentó, la pérdida de empleo comenzó a sentirse y al grueso de la población se le hace cada vez más difícil llegar a fin de mes.
La economía no es el único factor para el malestar vivido en el primer año de gobierno libertario. La violencia por redes sociales aumenta a pasos agigantados, las movilizaciones fueron recurrentes y la respuesta de las autoridades fue con “mano dura”, tras reiteradas aplicaciones del protocolo antipiquetes, sobre todo durante el tratamiento de la Ley Bases y el feroz ataque a jubilados cuando se debatía la ley de movilidad vetada por el Presidente.
Ante esta situación, se acerca el último mes del año, simpre difícil en Argentina, y son muchos los posibles focos de conflicto donde los sectores medios y vulnerables serán protagonistas. Se acerca un fin de año con preocupaciones y dudas sobre la estabilidad futura. Comenzando con los constantes aumentos en las tarifas, que tienen un reajuste en noviembre en materia de transporte, prepagas, combustible y energía.
Habrá que prestarle atención a esta última arista, sobre todo en electricidad. La suba fue importante durante todo el año y asoma una época donde los cortes suelen ser recurrentes, sobre todo en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA). El recurso del agua también está puesto en alerta, donde la mayoría de los afectados pertenecen a localidades del interior bonaerense.
Si bien el balance macroeconómico de la gestión de Milei es positivo, las problemáticas sociales estarán presentes en el cierre del año. El consultor político Carlos Fara sostuvo que toda esta situación “tiene un costo social alto”, pese al balance positivo en materia de baja de inflación.
También alertaron de la misma problemática desde el sindicalismo bonaerense. El referente de UPCN, Juan Pablo Marín Oyarzabal, remarcó que el conflicto aumentará debido a la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores y los aumentos salariales “no han alcanzado a mantener el poder adquisitivo del salario. Se ha visto depreciado”. Además, remarcó el aumento de tarifas y los cortes en energía eléctrica como uno de los conflictos que afecta especialmente a la clase media.
La situación más desesperante se vive en los barrios populares, donde las carencias pasan por la gran demanda en alimentos para comedores populares. Mientras tanto, la justicia falló por cuarta vez contra la ministra de Capital Humano y obliga a continuar con la entrega de alimentos.
GREMIOS Y MOVIMIENTOS SOCIALES
En pie de guerra contra el ajuste
Los gremios bonaerenses y los movimientos sociales son conscientes del daño al poder adquisitivo de los trabajadores que realiza el gobierno de Milei. La Tecla dialogó con el secretario general de UPCN, Juan Pablo Martín Oyarzabal, y con el referente de la UTEP Carlos Dos Santos, quienes brindaron un panorama acerca de los principales focos de conflicto en el próximo verano.
“La situación social para este cierre de año, para los sectores medios y bajos, la veo muy muy difícil. Es un año donde el salario se ha visto depreciado, producto también de políticas públicas decididas a nivel nacional que tienen que ver con la quita de subsidios tanto a los servicios como al transporte y energía”, sentenció el gremialista. También alertó que los cortes de energía en el verano pueden ser un problema a futuro y un motivo de protestas de la clase media.
Por su parte, Dos Santos alertó que se esperan diversas actividades y movilizaciones de los movimientos sociales para visibilizar la principal problemática del sector, que es la falta de entrega de comida por parte del gobierno nacional.
PABLO ROMA - CONSULTOR
“Puede haber movilizaciones, pero no veo un verano de alto voltaje”
En conversación con La Tecla, el consultor político Pablo Romá vaticinó un verano con movilizaciones, como es habitual en los últimos años. Sin embargo, destacó algunos aspectos positivos del gobierno de Javier Milei en estos primeros meses de su mandato.
Elc onsultor adelantó: “Me parece que en la opinión pública lo que prima es la necesidad de estabilidad, la necesidad de bajar los niveles de conflictividad, y en ese sentido me parece que también hay una presión sobre eso”.
Romá también remarcó como positivo para el Gobierno controlar la situación en las calles con el protocolo antipiquetes. Sin embargo, reconoció que “la situación social es compleja y delicada, porque el costo del ajuste fundamentalmente está cayendo sobre los sectores medios, los trabajadores, los jubilados. Ahí tenés una situación de mucha tensión, porque hay una regresión en términos de ingresos muy grande”.
El consultor marcó como principales conflictos para la clase media el planteo del gobierno en torno al aumento de las prepagas y cómo afectará la suba en las tarifas de energía y los constantes cortes en el suministro eléctrico, que es moneda corriente verano tras verano. También aseguró que puede haber protestas de algunos sectores, “pero también en estos últimos días el Gobierno ha mejorado en términos de optimismo y de confianza”.
“Creo que eso es una causa de descontento, pero el escenario de tensión, no sé si va a tener una manifestación conflictiva explícita en la calle. Obviamente que puede haber movilizaciones, pero no veo un verano de alto voltaje”, aseguró Romá.
Como aspecto negativo de las política de Javier Milei remarcó el mal uso que, tanto los funcionarios como algunos militantes, le dan a las redes sociales. “El Gobierno fogonea mucho un enfrentamiento a través de las redes, con un lenguaje y un contenido violento. Es un discurso con un contenido violento, que después me parece que no se puede hacer cargo de ese contenido, como ocurrió en la marcha universitaria. Eso es un problema grande”, concluyó
ENERGIA
Cortes programados para el verano y tarifazos que no se detienen
Según ADDUC, la clase media lleva acumulado un incremento de casi el 200% en sus tarifas de energía eléctrica, mientras que aumentó un 225,9% para el sector con menos ingresos.
Previo a ser echado del Gobierno, Eduardo Chirillo cruzó al del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, y aseguró que en el verano habrá cortes programados de electricidad sólo a las industrias y no a los hogares, pero dejó la incertidumbre. En la gestión libertaria esperan cortes de luz masivos accidentales durante el verano entrante, que es cuando se combina el salto del consumo con una menor oferta de energía.
Por otro lado, esperan que los comercios e industrias realicen cortes “voluntarios” o reduzcan su consumo. De todos modos, Energía aún no comunicó los detalles ni informó de sus planes a las entidades empresariales.
En tanto, se oficializaron nuevos aumentos para “mantener los valores reales”, un 2,5% en las tarifas de electricidad y un 2,7% en las de gas natural.