Nuevas dolencias ¿Es posible padecer de alergia al WiFi?
Una española reclama una pensión por incapacidad. ¿Se puede ser alérgico al WiFi? Parece una locura, pero puede ser una realidad que cada vez afecte a más personas
Aunque parezca la trama de una película basada en un mundo lleno de infecciones tecnológicas, en realidad se trata de un caso verdadero. Quienes dicen sufrir de "alergia al WiFi" usualmente padecen de insomnio, mareos, dolores de cabeza, vómitos, latidos irregulares, falta de concentración o pérdida de memoria a corto plazo. Al parecer, una de cada mil personas la padecen.
Rosa C.T., una funcionaria de la Generalitat de Cataluña, ha solicitado ante el tribunal una pensión por incapacidad permanente, después de tres años de inactividad laboral, debido a que sufre dolor de cabeza, fatiga y dificultad para concentrarse cuando está cerca de las ondas.
"Alergia al WiFi" es una expresión que se utiliza para llamar a la electrohipersensibilidad (EHS), la intolerancia a las ondas electromagnéticas de las conexiones inalámbricas y otros aparatos electrónicos.
Por el momento, la EHS no está catalogada como una enfermedad por ninguna organismo oficial. Desde la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirman que "no hay base científica para vincular los síntomas de la electrohipersensibilidad con la exposición a campos electromagnéticos".
Sin embargo, ya se han aceptado legalmente dos casos de EHS. El primero fue durante 2015 en Francia, donde los padecimientos de Marine Richard fueron reconocidos con una pensión de 800 dólares al mes durante tres años. Más tarde, en el 2016, un empleado de una empresa de telecomuniaciones en España también fue reconocido como enfermo y obtuvo beneficios económicos a cambio.